jueves, 12 de junio de 2025

Filosofía sin cancha: El rol de Imanol Ibarrondo en la Selección Mexicana y la crítica de Javier Aguirre

 

En el complejo entramado del fútbol moderno, los equipos nacionales buscan constantemente herramientas para optimizar el rendimiento colectivo, incluyendo el apoyo de expertos en psicología, liderazgo y cultura organizacional. En este contexto, el nombre de Imanol Ibarrondo ha resonado con fuerza en el entorno de la Selección Mexicana de Fútbol, no como preparador físico ni como psicólogo del deporte, sino como asesor filosófico y de liderazgo. Su presencia, sin embargo, ha despertado polémica, especialmente después del contundente comentario del exdirector técnico Javier Aguirre posterior al partido contra Suiza: “En la Selección no puede haber gente sin carácter, que se venga abajo tras un gol recibido” (ESPN, 2024). Esta frase, aparentemente dirigida a quienes no poseen las herramientas mentales adecuadas para sostener el alto rendimiento, encierra también una crítica velada a figuras como Ibarrondo, que sin formación específica en psicología deportiva, ejercen influencia sobre un equipo que compite en el más alto nivel.

Imanol Ibarrondo se presenta como un coach de liderazgo transformacional, con experiencia en el ámbito empresarial y deportivo, pero desde una perspectiva filosófica y motivacional. Su discurso se inspira en autores como Jorge Valdano, quien también transita entre el fútbol y la reflexión humanista, pero con la diferencia de haber sido jugador y técnico de elite. Ibarrondo, por el contrario, ha construido su figura más desde la retórica que desde la experiencia directa en la alta competencia futbolística. Su enfoque se basa en el autoconocimiento, la empatía, la vulnerabilidad como fortaleza y la creación de entornos de confianza (Ibarrondo, La primera vez que me metí en un vestuario, 2022), ideas poderosas pero también difíciles de aplicar sin el rigor metodológico que exige el deporte de alto rendimiento.

La crítica de Aguirre apunta a un problema de fondo: la falta de preparación profesional en psicología del deporte por parte de quienes influyen en la mente de los futbolistas. Un gol en contra no solo es un evento del marcador, es un golpe emocional y mental. Reaccionar con fortaleza ante la adversidad requiere habilidades entrenables, desarrolladas con base en evidencia científica, protocolos clínicos, y años de formación profesional. Según el Colegio Oficial de Psicólogos del Deporte en España, el trabajo del psicólogo deportivo incluye la preparación mental bajo presión, el control emocional, la concentración y la motivación específica para la competencia (COLEF, 2021). No basta con hablar de resiliencia o repetir frases inspiradoras. El fútbol de élite necesita profesionales de la mente entrenados específicamente para el entorno competitivo, no solo filósofos del balón.

Desde esta perspectiva, se abre una reflexión necesaria sobre la profesionalización del apoyo mental en los equipos nacionales. Ibarrondo puede ofrecer una visión interesante, incluso necesaria en algunos procesos de acompañamiento institucional, pero no puede ni debe ocupar el lugar del psicólogo deportivol que trabaja con herramientas evaluadas y adaptadas al alto rendimiento. La presencia de figuras como él puede tener valor en procesos organizacionales o en clubes con más tiempo de desarrollo, pero en torneos cortos, como una Copa del Mundo o la Copa Oro, se necesita impacto inmediato, precisión diagnóstica y entrenamiento mental dirigido a la acción competitiva, no a la contemplación filosófica.

Por otro lado, el perfil de Ibarrondo parece responder a una moda: el uso del fútbol como metáfora de la vida, y viceversa, para construir discursos aplicables al liderazgo empresarial. Esta corriente ha sido ampliamente explotada en conferencias, libros y consultorías (Valdano, Los 11 poderes del líder, 2010), y si bien tiene mérito en ciertos contextos, su efectividad en el vestidor, frente a jugadores que deben ejecutar con presión y urgencia, es cuestionable.

En conclusión, el fútbol mexicano necesita sumar talentos interdisciplinarios, pero con la preparación específica y validada en el entorno de competencia deportiva. La crítica de Javier Aguirre es más que una opinión: es un llamado a revisar la estructura de apoyo mental en la Selección Nacional. Personas como Imanol Ibarrondo pueden sumar si su rol es claro, complementario y no sustituye al del especialista. La excelencia en el fútbol no se improvisa, y la mente de un equipo no puede estar en manos de ideas bienintencionadas pero ajenas a la ciencia del rendimiento.


Fuentes:

  • ESPN Deportes (2024). Javier Aguirre critica falta de carácter en la Selección Mexicana.
  • Ibarrondo, I. (2022). La primera vez que me metí en un vestuario. Conferencia TEDx Donostia.
  • Valdano, J. (2010). Los 11 poderes del líder. Editorial Conecta.
  • COLEF (2021). Funciones del Psicólogo del Deporte. Consejo General de la Psicología de España.

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