Una Etica de la Personalidad en el Deporte
En estos días me ha tocado dialogar en las sesiones psicológica con diferentes deportistas sobre el aspecto de la ética de la personalidad en el deportista. Pues bien les comparto una lectura del profesor Juan Parent con el que me identifico en su totalidad.
El hombre está en permanente dialogo con la naturaleza y sus sistemas. dejarse llevar por ellos podría ser el principio de un fin porque el deportista más que un ser humano convencional tiene la responsabilidad de conducir la naturaleza en función de sus exigencias internas. Tampoco puede olvidar las limitantes que le pone el mundo exterior. Hay aquí una liberación que el deportista busca y la humanidad debe buscar. no en actos agresivos, que sólo son actos negativos desde el punto de vista de la libertad (trastornar u sistema socio político injusto o dirigentes deportivos inhumanos) no como la eliminación de los vinculos a las ataduras, sino como poder de creación de innovación en la espontaneidad. hacer que lo que no estaba comience a estar. La simple elección de bienes ofrecidos en abundancia a la sociedad industrial no es libertad cuando estos bienes sostienen una vida de miedo.
La persona y por ende el deportista solo existe al final del camino cuando el humano ( persona presente desde inicio como forma de estar ahí del espíritu) ha logrado asumir plenamente todo lo que pertenece a la vida, el instinto, el impulso, las tendencias, pero también en la medida en que se integra a una comunidad de "personas". La comunidad es la condición indispensable de los valores humanos. Esta integración podrá darse cuando yo como persona crea verdadera mente en la existencia de otras "personas" y que por esta convicción oriente mis acciones no solo en función a ellos, sino en función de ellos como tales.
Hoy la humanidad ha sido despojada de toda especia de fin, pero han tenido mucho cuidado en la conservación de la persona como individuo., pero este mismo individuo y su persona han sido desintegrados por lo que le falta a la humanidad "UNA RAZON DE VIVIR". La motivación como se entiende en el deporte es una tendencia hacia un fin, debe ser un elemento estructural dentro del deporte y de la personalidad del deportista. Si no hay ningún fin, nos encontramos en una justa deportiva y en una vida humana de una repetición motora puramente instrumental sin coparticipación afectiva.
